¿Por qué estudiar Comunicación?

Fue hace varios años cuando iba en la Secundaria cuando nos preguntaron “qué queríamos estudiar o a qué queríamos dedicarnos”. Muchos de mis compañeros decían que iban a ser médicos, arquitectos; uno que otro, que abogado y cómo no, también estaban los que no sabían qué hacer con su vida “total, estamos chavos todavía, ya habrá tiempo para pensar en eso luego” decían; pero ahí salí yo a decir que quería estudiar Comunicación y me preguntaron ¿por qué estudiar Comunicación?

Ahora bien, ¿por qué estudiar Comunicación? “Si no hay mercado, está muy saturado, no pagan y si no es en la tele, no hay trabajo”.

Es complicadísimo poder darse a la tarea de darle gusto a todos y esto no sólo aplica con los comunicólogos, simplemente a cuántos futuros médicos no les han soltado la clásica: “¿Medicina? Uy, no vas a tener vida” o a los psicólogos la de: “pero sólo vas a encontrar chamba como maestro”; sin embargo, a quien hay que darle gusto es a nosotros mismos, porque mejor que nadie sabemos todo lo que podemos lograr con esa carrera que queremos ejercer.

Por ello me gustaría enfocarme en estos principales aspectos que nos destacan y por lo que amamoser ser comunicólogos.

Buscamos transmitir lo que pensamos y sentimos

Los comunicólogos tenemos muchísimas formas para expresarnos, no nos gusta permanecer callados y siempre encontramos la manera de decirle al mundo lo que sentimos. Ya sea a través de un medio audiovisual, escrito, oral e incluso gráfico, pero siempre hayamos el modo de romper el silencio.

Nuestra creatividad nos da para experimentar diversas formas de comunicar ideas.

 Versatilidad

Los comunicólogos desarrollamos esa habilidad de adaptación a diferentes terrenos porque nos gusta aprender y aportar en todo aquello donde podamos.

Es parte de nuestro ADN; claro, no buscamos sobreponernos a los expertos en su área; pero afortunadamente nuestra carrera nos da el beneficio de llevar una amplia gama de materias teóricas y prácticas, por lo que hace muy complicado que nos estemos quietos.

En el mundo laboral hay comunicólogos laborando en diversas áreas y no porque “agarraron lo que hay”, sino porque a final de cuentas todo comunica y podemos inyectar nuestro conocimiento en otras áreas para fortalecerlas.

Más que ser todólogos, somos versátiles.

Somos una necesidad en el mundo laboral

Imagínate qué pasaría si no hubiera comunicólogos sobre todo en épocas donde es primordial mantener a la población informada.

Qué sería de la sociedad, influenciada por las fake news que ven en redes sociales. Que no tuvieran a la mano información verídica proporcionada por un periodista preparado o no pudieran ver una nota editada con imágenes perfectamente adecuadas, armadas por un profesional de la edición.

Ahora bien, no sólo en la noticias somos indispensables, el mundo empresarial siempre está bajo la necesidad de profesionales de la Comunicación que podamos implementar estrategias que velen por difundir el mensaje interno y externo de la empresa.

Tal es la necesidad, que las empresas ya cuentan con áreas específicas de Comunicación e invierten tiempo y dinero para el desarrollo de planes de Comunicación Organizacional.

Todo comunica, pero no todos comunican.

Amor por la profesión

Finalmente y para cerrar con broche de oro, el punto que para mí es el más importante, Amor por la Comunicación.

Si bien hay carreras impuestas por diferentes factores, como familiares, negocios o “el qué dirán”, la Comunicación no es una de ellas; quien decide ser comunicólogo es por amor a la profesión.

A los profesionales de la Comunicación nos brota la pasión por nuestra carrera. Nos encanta aportar y participar en todo.

Nuestra carrera nos da la oportunidad de conocer personas de todas las profesiones y poder brindarles ideas para potenciar sus proyectos. Además no podemos estar estáticos, por ello hay comunicólogos en empresas, como freelance, dando conferencias, entrevistando, dando clases, en fin en muchos campos laborales, ya que tenemos esa habilidad de encajar y poder transmitir las ideas fácilmente.

¿Por qué estudiar Comunicación? ¡Fácil, porque amamos ser comunicólogos!

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